martes, junio 04, 2013



Imaginen esta situación -muy frecuente, por otra parte-: un hombre o una mujer encuentran en la red a su media naranja, a quien sólo conocen por fotos y por lo que conversan a través de correos y alguno de los Mensajeros que se encuentran en la red. Están perdidamente enamorados, son felices, todo les sale bien gracias al amor que experimentan. Nunca se han visto, pero esperan hacerlo pronto, pero muchas veces esta espera dura meses, años, sin embargo, no tienen dudas sobre la existencia del Otro, pues el amor es la prueba de su existencia. El amor no puede equivocarse tanto, por otra parte, se sienten tan bien en esa relación que casi no importa que no existan pruebas reales acerca de la existencia del Otro, porque la alternativa sería catastrófica, sería caer nuevamente en lo cotidiano, en la vida gris de todos los días.


Los enamorados se vuelven ciegos a cualquier prueba que niegue su estado, son ciegos a pruebas de infidelidad, a pruebas de desamor, a todo lo que pudiera poner en peligro ese estado tan maravilloso que se llama amor. Pero ocurre que muchas de estas relaciones cibernéticas se construyen sobre la mentira, el Otro no es como se ve en las fotos, a veces ni es el de las fotos, a veces no es ni del sexo opuesto, porque mujeres se hacen pasar por hombres y hombres por mujeres. Conozco mujeres que se hacen pasar por hombres para enamorar a alguna conocida y sacarle información sobre algún tema de su interés. Hasta podría fácilmente crearse un programa que se comportara como un Otro. Existe un programa que no recuerdo ahora como se llama y que se emplea en psicoterapia, el programa devuelve las preguntas, refleja lo que dice la persona, toma alguna palabra y arma una frase con sentido, etc. Posiblemente en unos años pueda escribirse un programa tan preciso en sus respuestas que no podamos discernir si nos encontramos hablando con una máquina o una persona. Pero aquello a lo que quería llegar es que el enamorado toma como prueba de la existencia del otro lo que siente. Esto es lo que ocurre con los religiosos, toman como prueba de la existencia de Dios lo que sienten y cómo eso que sienten influye en la calidad de sus vidas.

Agregado del 5/6/13:

Luego de leer el artículo una amiga me recordó algo muy importante, que en la vida real el Otro idealizado se va desilusionando poco a poco hasta captarse tal como es y de esa manera no sólo se aprende sino que es posible realizar el duelo de la separación, en cambio, con el Dios de los religiosos esto no ocurre debido a que no se manifiesta y no es posible la desilusión progresiva que permita la desvinculación. Un Otro ausente está más presente que uno verdaderamente presente. Recuerdo que hace muchos años un político presidenciable construyó una imagen muy poderosa cuotificando sus apariciones públicas y no debatiendo jamás con otros políticos para no dañar su imagen. Los políticos de la oposición se enfurecían por este proceder, lo criticaban sin parar, no dejaban de hablar de él, y de esa manera crecía la imagen del político ausente y se debilitaba la de los opositores, pues se notaba la desesperación por no poder atacarlo de forma alguna, pues al hacerlo lo fortalecían y ellos se mostraban más débiles y humanos.

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3 comentarios:

  1. Anónimo2:59 p.m.

    Algo interesante es esto de que uno se enamora del otro y que pronto lo va a conocer.

    igual pasa con las religiones el mesias, el profeta, un angel o dios mismo...Vendra en el futuro.

    Y los que sabian que la idea de una promesa o un encuentro que nunca llega es un poderoso elixir del amor.

    Cuando nos enamoramos no esperamos unirnos con una mujer sucia o enferma, sino que nos enamoramos de las virtudes (segun nuestros valores) del futuro ser amado.

    Un ejemplo de este tipo de "amor a la tapada", seria este de los pueblos como los Arabes y la India, en que el par de enamorados solo se conocen hasta el dia del matrimonio, union previamente pactada acuerdo al interes de las familias de los novios.

    Vaya uno a saber que pasa por la cabeza de un par de Indues... supongo que mucha ansiedad y ellos sostienen que la conveniencia de estos matrimonios arreglados es superior a nuestro sistema de elegir pareja al azar.

    Es la emocion de poder cumplir un logro mas no hacer ese logro en si mismo.

    El sentido de planear.

    A veces ocurre que deportistas luchan por ser los numero uno en su campo, luchan enconadamente, pero cuando son campeones pierden inmediatamente el norte.

    Se les olvida que una vez que uno alcanza un logro hay que buscar uno Nuevo.

    igual pasa con los enamorados que no se conocen, son felices mientras no se conozcan porque saben que cuando se conozcan el amor desaprecera.

    Por eso nunca debemos conocer al Dios.



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    1. Porque si existiera y se manifestara desilusionaría y terminarían las religiones.

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  2. Anónimo1:57 a.m.

    o porque si existe, revelará que lo que soy, lo que deseo o a lo que aspiro, tiene algún sentido. Sin Él, la mismidad, es una auténtica estupidez existencial.

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